viernes, 27 de febrero de 2015

Elmer, el único el elefante de la manada que tiene nombre



“Cuando pienso en los álbumes, veo que no sólo es un tipo de libros para niños, es también un libro para adultos, con una forma peculiar. Me gusta pensar que escribo para el adulto que el niño será un día y para el niño que aún está en el adulto.” http://www.imaginaria.com.ar/2008/06/334/




1-      Presentación del libro


He elegido Elmer por varias razones, pero la primera y fundamental es que es un libro que a los niños les gusta y les divierte mucho.  Esta semana he estado mostrando el cuento a los 23 niños y niñas de mi clase (3-6 años de una escuela Waldorf),  se lo he dejado para que se acercaran a mirarlo de forma espontánea.  Lo han mirado, vuelto a mirar, para arriba, para abajo.  Me han pedido que se lo cuente, después que se lo lea, y cuando terminaba que volviera a empezar.  Un día me olvidé traerlo al cole y rápidamente me preguntaron por el cuento del elefante de colores “Leti no te olvides de traernos mañana el cuento”.    Es impresionante el atractivo que los cuentos de Elmer tienen para los niños.  


También es un libro al que yo tengo un cariño personal pues uno de los favoritos de mis niñas cuando eran más pequeñas y lo habremos leído en casa veinte o treinta veces.  Elmer es un personaje muy simpático que nos cae realmente bien.


La tercera razón es por ser una buena muestra de literatura infantil de calidad.  Es un libro cuyo primer fin es divertir y gustar al niño, ofreciéndole una experiencia lúdica y artística a la vez.  Tiene una alta calidad estética (su autor estudió bellas artes) con unas ilustraciones de gran colorido y atractivo que da gusto mirar y re-mirar.  Además permite al niño identificarse con el protagonista, le habla de temas que forman parte de la realidad cotidiana de los niños de hoy en día.  En resumen, es una fuente de placer y entretenimiento de calidad.


Elmer es uno de los clásicos de la literatura infantil y uno de sus referentes.  Se han vendido 7 millones de libros y se ha traducido a 50 idiomas.  La colección cuenta con 27 títulos hasta la fecha y se está preparando una serie de breves películas de dibujos animados.


Su autor David Mc Kee fue muy avanzado para su época.  Su primera edición fue en 1968 (no se volvió a editar hasta 20 años después en 1989), osea que fue escrito en plena época de los cánones de la paraliteraura infantil didáctica y moralizadora según leíamos en los apuntes de esta asignatura.




Mc Kee, 1935, nació en Italia, de padres ingleses. Pasó su infancia y creció en Tavistock, South Devon “tuve la suerte de poder caminar sólo, incluso a muy temprana edad, por los páramos; algo que hoy, ni siquiera en sueños sería posible” afirma el autor, para quien el contacto con la naturaleza y la posibilidad de disfrutar de muchos momentos de silencio han marcado su trayectoria como escritor.

Sus padres dejaron la escuela con 14 años pero ambos era muy cultos y les gustaba mucho leer. Su madre era una gran contadora de cuentos.

David McKee estudió en la escuela de Arte de Plymouth, luego se trasladó a Londres donde estudió en el Howsen College of Art. Comenzó a dibujar tiras cómicas para diarios y revistas hasta que se convirtió en un autor de libros para niños.

Su primer libro para niños fue Two Can Toucan publicado en 1964.  Su creación más famosa es Elmer (1968), el elefante multicolor inspirado en la obra de Paul Klee.  Además de crear libros infantiles McKee realiza dibujos animados y forma parte de una productora de animación, King Rollo Films. (García Sobrino, 1996).


Elmer, el cuento que voy a analizar, nos presenta a un simpático elefante, miembro de una manada de elefantes de todo tipo, pero todos ellos de color elefante. Elmer, en cambio, es multicolor. Elmer es diferente, y es único.  Y tiene un carácter muy alegre.  Junto a él los otros elefantes ríen y se divierten. Un buen día el elefantito decide cambiar de color para ser igual a los demás, se terminan las bromas y la manada se vuelve seria, silenciosa y quieta. Finalmente Elmer volverá a ser como es, y volverá a mostrar sus verdaderos colores. Termina el cuento con una gran fiesta de colores en honor a Elmer.  Mi ilustración favorita del cuento.







2-      Ficha bibliográfica


-          Título: Elmer

-          Autor e Ilustrador: David Mc Kee

-          Editorial: Beascoa

-          Fecha Primera Edición: 1968.  1989 Andersen Press Ltd.

-          Edad en la que me baso para realizar este análisis: 3-6 años.


Las características más destacables de este grupo de edad, según el contenido de esta asignatura son:


  • ·         Perciben relación palabras –imágenes
  • ·         Distinguen ritmo y sonido de las palabras
  • ·         Sentido de la narración
  • ·         Animales humanizados
  • ·         Temas del entorno social en el que vive
  • ·         Les interesa más la trayectoria del personaje
  • ·         Les gusta la sucesión de acciones
  • ·         Tendencia a identificarse con el protagonista
  • ·         Lenguaje simple
  • ·         Final feliz
  • ·         Estilo sencillo
  • ·         Estructura argumental lineal
  • ·         Onomatopeyas
  • ·         Lenguaje simple recursos estilísticos sencillos y asequibles
  • ·         Libro álbum ilustraciones a color
  • ·         Tipología grande
  • ·         Puede leer un libro solo
  • ·         Imágenes que narren pequeñas historias, predominio       imagen sobre texto, uso de color
  • ·         Texto: breve que motive al niño a leer
  • ·         Temas: protagonistas animales, experiencias vividas
  • ·         Formato: resistentes, cuadrados



Quería hacer una pequeña reflexión sobre el grupo de edad de este libro.  Es verdad que si tenemos que acotar las edades para este libro sería 3-6 años, pero mi opinión personal que es Elmer (y muchos otros libros infantiles) es un libro para un rango de edad más amplio y abierto que incluso resulta atractivo para los adultos.  Creo que Elmer admite varias lecturas a varios niveles, y por tanto, igual resulta atractivo para los niños de 3-6 como para niños más mayores, o para adolescentes.


Para preparar este trabajo rescaté el cuento de Elmer de nuestra biblioteca y lo dejé en mi mesa de trabajo.  Me hizo mucha gracia ver a mi hija de 10 años, a la que le encanta leer y que ahora está entusiasmada con Harry Potter, como cogía el cuento de Elmer y esa noche lo leía en su cama con cara de diversión.


Mc Kee afirma que Elmer “no sólo es un libro para niños, es también un libro para adultos, con forma peculiar. Me gusta pensar que escribo para el adulto que el niño será un día y para el niño que aún está en el adulto”.   “Hoy en día existe un movimiento que estimula a los jóvenes lectores para que se acerquen a los álbumes.  Un libro ilustrado puede ser un cuento que funciona para niños pequeños, pero también puede ser una manera de narrar un cuento con palabras e imágenes para los más mayores”. (Mc Kee, 2001).


3-      Formato


Aspectos externo


El formato de este cuento es un libro –álbum, uno de los formatos más adecuados para los niños de 3 a 6.  Recordemos que los álbumes aparecen en los años 90 y se caracterizan porque el texto e ilustración entran en diálogo, de modo que el libro puede ser “leído” por los niños que no saben leer,  sólo viendo las imágenes.  Ilustración y texto se relacionan y aportan información complementaria en el cuento.  Los niños  suelen aprender el texto de memoria, y haciendo uso de su razonamiento icónico (como veíamos en el bloque de contenido de la asignatura) y su comprensión icónica disfrutan leyendo el cuento una y otra vez sólo viendo las imágenes.  


Es interesante diferenciar este formato del cuento con ilustraciones,  en el que las imágenes son sólo una reproducción gráfica de lo que cuenta el texto.  En el libro-álbum las imágenes aportan información  y pueden leerse por sí mismas.


Elmer se presenta en un formato de tapa dura, adecuado para el grupo de edad por ser más resistente.  Su forma es cuadrada y su tamaño mediano, también es atractivo y manejable para los niños pequeños. 


Portada
 

Tiene al color como protagonista y a Elmer como único elemento identificable.  Es un portada de gran atractivo para este grupo de edad que disfruta con cuentos de animales humanizados y les encantan el color.  Además es muy llamativa para los niños pequeños que se quedan mirándola hechizados y rápidamente desean  abrir el cuento y mirar sus páginas.

Para Mc Kee, “Un álbum es un cuento basado en imágenes y palabras.  Los libros-álbum son parte de la literatura y del arte.  Hay cosas que se pueden hacer en un álbum que sólo consiguen realizarse bajo ese formato.  El álbum es un medio en sí mismo.”(Mc Kee, 2001).


Tipografía


Su tamaño es grande, su forma limpia y sencilla.  Hay muy poco texto acompañando a cada ilustración.  Esto es lo ideal para los niños de 3 a 6 que necesitan tipografías grandes y textos breves que dejen el protagonismo a la imagen y les animen a intentar leer.


Ilustraciones


En el caso de Elmer quiero detenerme un poco en las ilustraciones porque son realmente interesantes.  De hecho su autor quiere dar, en Elmer, la importancia que se merece a la ilustración, como un discurso que va más allá de la mera recreación del texto.  


Para ilustrar Elmer, Mc Kee se basó en la obra de Paul Klee, pinto alemán de mediados del SXX de la escuela expresionista y surrealista. (García Sobrino, 1996 y Metroplitan Museum of Art).


 




Lo que más destaca de las ilustraciones de Elmer  es la importancia que tiene el color.  Mc Kee usa los colores como la música, para expresar sentimientos y emociones en la historia que sólo se transmiten a través de ellos.  Utiliza acuarela con pastel y pinturas, vistosas y coloristas, para hacer unos dibujos sencillos y frescos.  A los niños de estas edades les llaman mucho la atención los contrastes, en este caso muy bien logrado entre la explosión de colores de Elmer y el anodino y uniforme color de los otros elefantes.
 
También destaca como el autor juega con las reglas de la perspectiva, “Quiero que el libro sea algo físico, algo que necesitamos coger y dar vueltas en todas las páginas para ver la imagen de frente”.   Su  juego trasgresor con las reglas de la perspectiva obliga a la manipulación física del libro.  Aquí se ve su influencia cubista, en la idea de ver las cosas desde diferentes puntos de vista.  De este modo la ilustración se hace más interesante para el niño. (Mc Kee, 2001).






Igualmente interesante es el uso de formas esquemáticas -especialmente en los árboles-, con la que crea un mundo plástico próximo a los niños de este rango de edad. Los árboles, la lluvia o la luna están dibujados mediante unos trazos que pueden atraerles.  El autor plasma un paisaje y unos personajes que forman parte del imaginario infantil.


O el uso del color azul para los árboles “si miras los árboles verás todos esos colores diferentes.  Hay una tendencia a pintar los árboles verdes que es muy aburrida y no es como la realidad.”, dice McKee. (Mc Kee, 2001).




La selva con sus gamas de rosados, amarillos, verdes, violetas.  Los fondos lisos para la manada gris, y un cielo de trazos de lluvia para devolver a Elmer su piel colorida, culminan en el desfile de elefantes de mil colores festejando "El día de Elmer".


Todos estos recursos permiten al autor configurar un mundo pictórico en torno a las ilustraciones  de Elmer, que, si bien, está muy próximo al mundo del niño de esta edad (por las formas, elementos y colores que utiliza) está desarrollando su sensibilidad y su gusto a formas de arte nuevas para él y de gran calidad. 


Creo que es importante para el desarrollo estético y artístico del niño, ofrecerle cuentos con buenas ilustraciones de los más variados estilos.  Esta exposición a las obras de los grandes ilustradores de la literatura infantil, o lo que es lo mismo,  a distintas formas de arte, le permitirá en el futuro ser un adulto con un sentido artístico cultivado. Y a mi modo de ver, esta es otra de las grande aportaciones de los libro-álbum.



4-      Contenido


Tema


Un incidente racial cuando paseaba con su hija (de origen indio), inspiró al autor para escribir el primer Elmer.  David Mc Kee quiere hacer cuentos con ideas dentro.  “Uso palabras e ideas que los lectores ya tienen dentro de sí.  No me gusta poner las cosas muy claras, prefiero hacer historias más abiertas que tengan varias lecturas….. Los niños son el futuro. Tenemos una gran responsabilidad con la infancia y cuando escribo un libro quiero que tenga valor y esté lleno de ideas.  Es importante que los niños tengan libros de calidad”. (Jeffries, 2014).


Los dos grandes temas de este cuento son: i) el respeto hacia el otro y la aceptación de las diferencias y ii) la importancia de ser uno mismo y celebrar ser diferente.


Ambos son temas del mundo cercano y diario de los niños de hoy en día que viven en un mundo multicultural y multirracial, por un lado, y están en el periodo de 3 a 6 de tomar conciencia del yo, de su individualidad frente al otro y, del mismo modo, descubrir sus diferencias respecto al otro (Santrock, 2006).  Desde las diferencia físicas (color pelo, altura, más rápido, más lento) a las de forma de ser, entorno familiar, y otras.

El niño de 3 a 6, en pleno descubrimiento de quien es, acoge con gran interés las historias que hablan de diferencias entre animales, y que le animan a aceptar quien es, diferente al otro y celebrar las diferencias.  (Díez Navarro, 2002).

Elmer acompaña al niño en su descubrimiento de sí mismo, y en el reconocer las diferencias y aceptarlas.  El autor reflexiona sobre esto y observa que a los humanos nos encanta ver la diferencias en otras cosas: perros, flores, coches….pero nos cuesta aceptarlas en las personas.  Elmer intenta ser como los otros elefantes, pero al final tiene que ser él mismo. (Jeffries, 2014).


Para tratar este tema, Mc Kee utiliza el sentido del humor.  Los niños pequeños tienen un gran sentido del humor y les encantan los cuentos que les hacen reír.  Un tema como este puede generar rechazo si se plantea de forma directa, pero tratado desde el prisma del humor se recibe con más agrado.  De hecho, Elmer es un personaje con un gran sentido del humor.



Estructura


La estructura de este cuento es clásica, con una presentación, nudo y desenlace.  El argumento es lineal.  


El protagonista se presenta en la historia en contra-posición con los otros personajes (resto de elefantes), el nudo o conflicto viene de que no se siente bien siendo distinto y quiere ser como el resto y en el desenlace resuelve el conflicto a través de su sentido del humor y se da cuenta de que tiene que ser él mismo.  El resto está contento de aceptarle como es.


Esta estructura es la más adecuada para niños de 3 a 6 años que ya pueden seguir narraciones sencillas, con final feliz.


Protagonista



La construcción del protagonista en este cuento se hace por oposición al resto de personajes.  Elmer es el único elefante que tiene colores, que tiene nombre y que tiene una personalidad definida.  Esta técnica es muy apropiada para niños de 3 a 6 que se sienten más traídos por objetos o personajes que muestran contrastes.  Los contrarios despiertan su interés. (Llach y De Ribor, 2010).

Elmer es un elefante multicolor con una personalidad como sus colores, alegre, optimista y muy bromista, siempre dispuesto a divertirse y a hacer reir a sus compañeros de manada.  Sus colores y su diferencia frente a los elefantes normales llaman poderosamente la atención de los niños.


Su simpatía y alegría facilitan que los niños de esta edad se identifiquen con él.  Todos querrían ser Elmer.  A esta edad los niños dotan de rasgos humanos a los animales y los perciben como si fueran personas. (Bloque 1, Asignatura Literatura Infantil).  Así, los niños entienden fácilmente a Elmer y lo que le pasa, porque en su vida diaria están comenzando a sentir esas diferencias tan palpables en el elefante.


Es un protagonista muy interesante porque no es plano.  Por un lado es bromista y alegre, pero por otro está triste y no se siente a gusto siendo distinto.  Esta tensión entre sus dos partes dotan al personaje de mucha cercanía emocional con el niño, que a esta edad ya comienza a ser consciente de lo que siente (Santrock, 2006), sobre todo cuando es tristeza.  El cuento permite a los niños vivir la tristeza que a veces han sentido al experimentar sus diferencias, al identificarse con Elmer.


El protagonista va sufriendo una evolución a medida que avanza el cuento.  Pasa de rechazarse a sí mismo, al no querer tener colores y ser igual al resto, a poco a poco irse aceptando y darse cuenta de que es bueno ser diferente y que necesita a sus colores para ser él mismo y que los otros le reconozcan.  Necesita sus colores para pasarlo bien con sus compañeros.  


Gran aprendizaje para nuestros niños pequeños.



Resto personajes


El resto de personajes del cuento son los compañeros de manada de Elmer y los animales de la selva.  Son personajes grupales, de tipo coral, ya que no hay ninguno que destaque de forma individual, ni que tenga una personalidad concreta.  De hecho, ninguno tiene nombre, excepto Elmer.  Son personajes de apoyo para construir la historia.


Valores y contravalores


Aceptación de uno mismo, el respeto al otro,  la tolerancia, la diversidad.


Como ya he comentado antes, creo que estos valores son muy apropiados para los niños de 3-6 que están en el proceso de descubrir su yo, conocerse a sí mismos, tomar conciencia de las diferencias.  (Díez Navarro, 2002).

Acompañarles en este proceso con cuentos que traten de aceptación, tolerancia y respeto al otro me parece muy necesario.  Abrir camino en la adquisición de unos valores que se irán afianzando en las siguientes etapas de su desarrollo evolutivo.


Es importante volver a incidir en este apartado en la idea de que el objetivo de Elmer no es educar en valores.  El objetivo es dar al niño “arte creado con palabras” (María Moliner), algo que Elmer cumple sobradamente. Pero si además el cuento favorece el desarrollo emocional y moral del niño, es bueno aprovecharlo.


Lenguaje 


El lenguaje de este libro es simple, el vocabulario muy adecuado para niños de esta edad y los recursos literarios son fáciles de decodificar. Las estructuras gramaticales son sencillas.  


Se utilizan recursos como: la enumeración (de colores, de rasgos de los elefantes de la manada), el diálogo, la voz reflexiva (cuando Elmer se habla a sí mismo), onomatopeyas (¡BUUHHHH!) que tanto gustan a los niños de 3-6.



También utiliza un estilo humorístico.


Conclusión


Elmer me parece un libro muy apropiado para utilizar en el aula de infantil de 3 a 6.  Creo que se podrían trabajar en tres direcciones:


1-      Disfrutar con literatura infantil de calidad: este sería el principal objetivo de llevar Elmer al aula: permitir a los niños el simple placer de disfrutar de un cuento de calidad, divertido y que les habla de temas que les son muy cercanos.  Leería el cuento a los niños durante varios días seguidos, por el puro disfrute de escucharlo y mirarlo.


2-      Los valores: una vez disfrutado del cuento, se podría aprovechar para trabajar el tema de los valores que antes hemos comentado, pero yo lo haría de forma muy espontánea, sin ninguna actividad cerrada, sino facilitando el diálogo entre los niños, quizás con alguna preguntas que inciten a la reflexión y buscando entre todos soluciones a los conflictos que fueran planteando en relación a la temática del cuento.


3-      El arte: También me parecería interesante aprovechar la parte artística del cuento, permitiendo a los niños experimentar y vivir los colores, con distintos materiales como acuarela, cera, témpera.  Los niños podrían pintar durante varios días con los distintos materiales, no tanto para hacer dibujos concretos sino para experimentar los colores y sus mezclas  y combinaciones.




Bibliografía

 
  • Díez Navarro, C. (2002). El piso de abajo de la escuela. Barcelona: Grao.
     



  •        Llach, S y De Ribor, B. (2010). Contrarios y aprendizaje: preferencia por las diferencias salientes entre objetos. Educar, 46, 107-121. Girona. http://dugi-doc.udg.edu/bitstream/handle/10256/8447/Contrarios-aprendizaje.pdf?sequence=1
     


  •  Metropolitan Museum of Art. Paul Klee. Nueva York. http://www.metmuseum.org/toah/hd/klee/hd_klee.htm
     

  • Santrock, J. (2006). Psicología del Desarrollo: El ciclo vital. Madrid: Editorial McGraw Hill.

10 comentarios:

  1. Me parece genial tu análisis del cuento, esta muy completo. Sobre todo me resulta muy interesante la aportación que realizas para trabajar este cuento desde el punto de vista artístico. Había leído miles de veces este cuento pero nunca me lo había planteado. Gracias por tu aportación.

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    1. Un buen álbum de imágenes debe aportar a los receptores una doble experiencia artística: la plástica y la literaria. Tienes que re-aprender a mirar estos libros desde esa perspectiva.

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  2. Gracias por tu comentario Sandra. El primer comentario que recibo en mi vida, en mi primer blog. ¡Qué ilusión!.

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  3. Muy completo tu análisis de Elmer, Leticia, y con “mucho color”, acorde al cuento que has elegido. Por cierto, lo he vuelto a leer y a mí también me encanta.

    Desde luego que el autor, David Mckee, es un artista. Como he leído en su biografía (en el link que nos adjuntas), es ilustrador y creador de dibujos animados.
    Es muy interesante lo que nos cuentas de la influencia de Paul Klee en las ilustraciones de Elmer. También, el uso que hace del color “para expresar sentimientos y emociones en la historia”, lo que creo que logra con acierto.

    Una de las cosas que más me gusta de esta historia es el sentido del humor del protagonista, Elmer. Es cierto que, cómo dices, todos los niños se identifican con él, quieren ser como él. Hay una identificación emocional de los niños con el personaje.

    Leer tu análisis me ha permitido profundizar más en el cuento y ver y apreciar cosas que había pasado por alto, además de conocer un poco más la figura del autor, del que destaco la frase que nos citas:“Me gusta pensar que escribo para el adulto que el niño será un día y para el niño que aún está en el adulto.”

    Muchas gracias, Leticia!

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    1. Gracias por tus palabras Carmen. Leticia

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    2. Muy buen comentario, Carmen.
      Una reflexión: no es lo mismo identificarse con un personaje que "querer ser como ese personaje". Aunque Elmer es un adolescente (la necesidad de pertenencia -que es lo que hace que Elmer desee ser como los demás- surge en esta etapa, es cierto que los peques se identifican con él porque los rasgos de su carácter son fácilmente asumibles en edades tempranas.
      En otras historias, las folclóricas, por ejemplo, y sus versiones cinematográficas (con Disney a la cabeza) no hay identificación posible entre una niña de 5 años, por ejemplo, y Elsa o Anna de Frozen. Pero se convierten, para ellas, en modelos a seguir; es decir, quieren ser como ellas y juegan a ser ellas aunque no hagan ni digan cosas propias de una niña pequeña.
      Es importante tener en cuenta esta diferencia para tratar de forma diferenciada la literatura de autor - propiamente infantil- y la literatura folclórica.

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  4. ¡¡¡Buenas tardes Leticia!!!!
    Hemos elegido el mismo libro para analizar, me ha encantando tu análisis, me parece muy completo.
    He visto en tu entrada una aportación que no sabía, el tema del arte, de los colores... Es algo que no sabía y no tenía conocimientos de ello, que me apunto para un futuro como educadora. Y así tener otros ámbitos que trabajar con este libro.
    Creo que tu análisis sigue la estructura que nos dio como guía la profesora, y que es correcta y muy completa.
    ¡¡Tengo ganas de leer tu segunda entrada!!
    Un saludo.

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    1. Muchas gracias Marina. Si, el tema de Elmer ys us colores es muy interesante, igual que la influencia cubista en algunos de sus dibujos. Voy a leer ahora tu análisis. Un saludo y gracias, Leticia

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  5. Un excelente trabajo, Leticia. Lo único que debo pedirte es que concretes la edad en un solo curso de EI porque, aunque Elmer llegue de una forma o de otra a los niños de entre 3 y 6 años, hay cuestiones de las que se manejan en la historia que son más propias de una etapa concreta que de otra. Las experiencias de los niños de 5-6 les permitan descubrir muchos más aspectos de sí mismos en relación con Elmer que las de los peques de 3-4.
    Cambiando la edad y revisando si todo lo que has analizado se ajusta, tu análisis será perfecto.

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